martes, 10 de noviembre de 2009

VENERABLE PADRE JULIO MARÍA MATOVELLE POETA . PONENCIA DEL II CONGRESO INTERNACIONAL MATOVELLANO REALIZADO EN IPIALES.

MATOVELLE POETA

PONENCIA


SINTESIS
 P. Ernesto León Díaz



La poesía en Matovelle fue un canto a la vida, a la muerte, tristeza y alegría, con un tono existencialista le habló a la inspiración y a la ansiedad, con el amor de quien ama a su terruño, ensalzó a su patria y con la fuerza del espíritu hizo de la poesía una oración.
Matovelle hombre multifacético de mediados del siglo XIX, receptor de influencias políticas y literarias forjó su vida en varias disciplinas de las ciencias humanas y bebiendo del pozo del nacimiento tardío como de la ilustración supo nutrirse de las mieles de la sabiduría cultivando una mente abierta al estudio de los planteamientos filosóficos de índole racionalista, empirista e idealista.
Para él la sabiduría no es solamente intelectual; sino, un don que procede de Dios.  Matovelle sumergido en el mar de la cultura de su tiempo y coyunturas sociales, políticas y religiosas, supo encumbrarse en todas ellas para plasmarlo todo en  poesía.
En el siglo XVIII y XIX época de presencia del P. Julio María  Matovelle, existen grandes cambios sociales y políticos en el Ecuador, la literatura está influenciada por sentimientos independentistas del pueblo ecuatoriano, aspectos que influyen en la expresión lírica de sus escritos, siendo una necesidad personal y no como un ejercicio de retórica.
Para Matovelle como poeta, Dios es sinónimo de belleza, que está en la identidad del ser y  reside en el corazón humano, que es al mismo tiempo la lira de Dios, cuya expresión es la poesía.
Entre las diferentes escuelas poéticas no se podría encasillar su obra; pues, esto implica empobrecerlo pudiendo decir que vive un modernismo teñido de abundantes imágenes del romanticismo, siendo un hombre de fe y plegaria constante, concibiendo la vida hasta la trascendencia.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Poesìas Ganadoras del II Congreso Internacional Matovelle Poeta y Legislador realizado en Colombia.




MATOVELLE “SACERDOTE DE DIOS”
Padre Julio María Matovelle en el centro 

Desde el vientre materno se inició,
Tu vocación firme y sublime del amor,
Hacia los altares esa luz iluminó,
Para calmar del humano tanto dolor.

Así comenzó tu vida sacrificada,
En soledad, florecieron tus virtudes,
Inclinado para orientar a las almas,
Que buscan elevar tantas inquietudes.

Julio María; eres el crisol deseado,
Para purificar corazones que laten,
Y, alrededor del mundo van sembrando
Ejemplos de vida, con unción sacerdotal.

Hombre de sabiduría clara: Paladín
Florecido en los valles del Azuay,
Para ser interlocutor sin fin,
De esas almas que te rezan sin desmayo.

Caminando por senderos que no olvidas,
Buscando almas perdidas y descarriadas;
Acogiste con devoción la fe prometida,
Por esos seres que veneran tu partida.

Matovelle, sacerdote de Dios con alteza,
Bendice a tantos hijos fidedignos
Que siguen tus enseñanzas etéreas,
Prodigando siempre tus santos ejemplos.

Dadivosas manos que todo consiguen
Mientras tus hijas con ese amor,
Riegan en el mundo dulces mieses,
Que calman en cada ser, todo dolor.

Padre Matovelle: desde la lejana Italia
Te veneramos como el Alter Cristo Divino,
Como el Salvador de almas que vigilan
Y, que confían ciegamente en tu destino.
(Oscar Quinde Robles, Quito- Escuela Materno Fiumeto-Suore Oblate Marina dei Pietra Santa- Verónica Jiménez, dennos Paucar, Florencia Quinde- Pisa, Toscana, Italia



MATOVELLE: HUMILDAD, SERVICIO, VERDAD

I
Siervo de Dios, Julio María Matovelle
Sol de eternos rayos que alegras el día,
Abierto por doquier,
Mensajero de los hombres.

II
Dicha de los andes,
Consuelo de los pobres
Que compartiste tu alimento
Para poder sobrevivir.

III
Llegaste a Isabel,
Para tener calor de hogar
Y así poder cumplir
Tu gran grata misión.

IV
Naciste con alma de poeta,
Describiste al sol, al viento
Al pájaro y la flor,
Cantaste con esplendor lo bello del amor.



V
Te llenaste del Espíritu Santo
Aprovechaste todos sus dones
Utilizándolos sin egoísmos
Para hacer el bien a todos.

VI
Un hombre que siendo sabio
Se acomodó a la simplicidad
De los hombres más humildes
Sin esperar recompensa alguna.

VII
La pobreza tu fiel amiga
Y tu amarga orfandad
Te llevaron a María
Para hacerte inmortal.

VIII
Con tu paciencia y humildad
Conseguiste avanzar
Y así poder llegar
A la cumbre celestial.

IX
Matovelle diste ejemplo al mundo
Cultivando tus tres grandes virtudes:
La verdad, el bien y la justicia
Para ser orgullo en la humanidad.

X
Matovelle siervo fiel,
Tus dones hemos de aprender
Cultivando siempre el bien
Cada vez mejores hemos de ser.
(Luis Guillermo Pinchao Pasuy, Prof. Institución educativa Vereda Chapal- Funes

UNA TRAYECTORIA SACERDOTAL

Matovelle, Cuenca fue tu ciudad natal,
Cuna de grandes hombres arribistas,
De paisajes recreativos y riqueza primordial;
Que orgulloso me siento al recordar.

Naciste un niño especial,
Con una virtudes predilectas, sacrificio y caridad.
Diste lo más valioso de tu vida
Haciendo voto solemne de tu virginidad.

Matovelle, la vida te supo enseñar
A ser humilde y pobre, como el Niño de Belén
Trayendo en tus manos la ofrenda predilecta
De tu donación total.

En tu trayectoria de pobre,
Se inspiró tu vocación
Para ser sacerdote santo,
A través del sacrificio, el ayuno y la oración.

Con el lenguaje de Dios te comunicaste,
Con el Banquete Eucarístico, te alimentaste,
Con la experiencia de los santos te santificaste
Y con la miseria de los pobre te identificaste.

Por eso te hiciste sacerdote
Como instrumento de Dios
Para ser puente y camino del peregrino
Que divaga por el incierto del camino.

Tu delirio eran los pobres,
Tu obsesión la orfandad,
Tu lema, “Todo por a Dios”
Y tu ideal, la santidad.

Tu muerte fue epifanía,
Tu corona el galardón,
Tu esperanza la resurrección
Y tu gloria el encuentro con tu Dios.

La Virgen Dolorosa te inspiró valor,
El camino del calvario, la meta final,
La cruz del Nazareno, el símbolo de amor
Y el grito de agonía, la voluntad de Dios.

Desde el cielo, Matovelle,
Tus nupcias celebrad
Porque bien merecido lo tienes
Ya que en la vida supiste amar.
(Nubia del Rosario Coral Villarreal, Rgsa Oblata- Funes, Nariño, Colombia)

Venerable Padre Julio Marìa Matovelle fundador de las Hnas Oblatas. Legislador.

MATOVELLE COMO LEGISLADOR.


Luego de obtener su título de bachiller en 1871 funda la sociedad llamada \"La Esperanza\" la cual pretendía impulsar la literatura, y la cultura en general; posteriormente esta sociedad se convirtió en el \"Liceo de la Juventud\" de la cual formaron parte grandes intelectuales cuencanos de la talla de Remigio Crespo, Honorato Vázquez, Rafael María Arízaga, entre otros.

Posteriormente Matovelle ingresa a la Universidad de los Jesuitas donde obtiene su título de Doctor en Jurisprudencia y Abogado de la República; ejerciendo su profesión se dedicó a defender a los pobres y desamparados y a luchar por la justicia.


Como abogado, sus escritos, su palabra fácil, convincente y de encantadora dulzura, le aseguraban el triunfo frente a sus contrarios, Como patriota, el fusil posaba sobre sus hombros, como periodista en “La Voz del Azuay” le abrían las puertas de la política.

Matovelle había triunfado. El huérfano de Tanda Catú, el diamante hallado por esa mujer oscura y profundamente cristiana, María Quinde, aquel que mendigaba a sus compañeros buenos libros para instruirse.
Fue profesor en el Seminario de los Jesuitas de derecho público, eclesiástico y de ciencia constitucional.

Con la caída de Borrero, Matovelle pierde la cátedra de filosofía, ni un año duró en el cargo.

Así se dedica a la actividad que desde el principio fue inicio de su caridad “La defensa de los pobres”, ejerció su profesión de abogado defendiendo a aquellos presos que no tenían quien los defendiese por falta de dinero todo por amor a Dios y a la Virgen, esa era su paga.

La abogacía para el fue el sacerdocio de la justicia. Medio inestimable de ejercer obras de caridad.

Matovelle afirma: “ La política hay que examinarla con cuidado dejándonos de toda pasión. El error político es siempre de grandes consecuencias, eso lo confirma con los errores de los liberares dentro de Ecuador”.

Para Matovelle, el derecho Público Eclesiástico que regula las relaciones de la Iglesia con el Estado es de vital importancia. Sostiene que no se ataca tal o cual punto de la fe, de disciplina o de moral, sino el conjunto total e los dogmas, el cuerpo completo de la moral y el código íntegro de las disposiciones canónicas.

La iglesia para Matovelle es necesaria, y para el individuo y para el Estado, y este debe rendir culto externo a Dios.

Censura la debilidad de los liberales católicos, santos en su casa, demonios en el poder público, Santos en lo privado y demonios en la política, en la dirección de las naciones.

La Iglesia como religión forma un Estado sagrado, exterior jurídico y perfecto en su esfera, y como tal forma parte del concierto de las naciones en el derecho Internacional.

Las Ciencias políticas en que el P. Matovelle comprende “ EL TRATADO DE ECONOMÍA” publicado después de su muerte, en dos tomos de 268 páginas.
“EL DERECHO PÚBLICO ECLESIASTICO” que se publicó en el año de 1892.
Estas obras fueron escritas por el Padre Matovelle para atender a las necesidades de la cátedra.

Y es en esta etapa de su vida, luego de profundas meditaciones donde se va formando el sacerdote, pues descubre en su labor pastoral e intelectual que la grandeza del hombre no está solamente en hacer bien las cosas, si no en hacerlas por amor a Dios. A sus 27 años Matovelle es consagrado como sacerdote por el Obispo de Cuenca, Monseñor Estévez de Toral.

Por su compromiso con la defensa de las grandes causas sociales, Matovelle ya siendo sacerdote, fue elegido por el voto popular como representante de las provincias de Azuay y Cañar ante el Parlamento Nacional, allí su elocuencia y erudición le dieron gran renombre político.

Al realizarse la Asamblea Constituyente de 67 diputados que debía reunirse en Quito el 9 de octubre del mismo año. La provincia del Azuay puso sus ojos en Julio Matovelle, el expósito que debía convertirse en árbitro de los destinos de la República

Ante el Parlamento, en el que laboró por 10 años, fue el gestor y mentalizador de la construcción de la Basílica del Voto Nacional (dedicada a la consagración del Ecuador al Sagrado Corazón) y del monumento de la Virgen en el Panecillo, en Quito.
Asistió como Diputado por su provincia a varias asambleas y congresos donde su elocuencia y erudición le dieron gran renombre político, pero también le significó la enemistad y el destierro al Perú por parte del gobierno liberal del Gral. Eloy Alfaro

Al hablar de la libertad de prensa nos dice Matovelle: “ La prensa en manos del crimen, invocando la libertad, se ha convertido en tea incendiaria que todo lo devasta y todo lo destruye; Un estado bien organizado debe impedir este abuso y al hacerlo no ataca la libertad, a menos de que se hable de la libertad del mal, en cuyo caso habría que concluir que son se pueden construir caminos, por que se quitarían a los viandantes la libertad de despeñarse.”

Declara que la libertad sin límites es perjudicial para el ser humano: “ La barbarie y el salvajismo profesan la libertad sin límites; la civilización encierra la libertad dentro de límites honestos”

En cuanto a la libertad electoral y al derecho al sufragio no coaccionado nos dice: “ Un mes antes de las elecciones y durante las mismas, ninguna autoridad sea política o eclesiástica, podrá hacer de palabra o por escrito, ni aún indicaciones, que coarten directa o indirectamente la libertad del sufragio”

Su doctrina era de iglesia. Nos dice: súbdito debe obediencia incluso a los gobiernos tiránicos o ilegítimos, en lo relativo a la conservación del orden, no fue comprendido y se le acusó de Veintimillista, o al menos partidario el perdón de los tiranos.
Al triunfar la revolución liberal “se creó un vacío entorno a Matovelle” y su estrella como Orador parlamentario se eclipsó definitivamente; pues, de allí en adelante, los sacerdotes no pudieron ser electos miembros del Congreso por prohibición expresa de la Constitución de 1.896-97.

La labor cumbre de Matovelle es su defensa de la Basílica El 22 de febrero de 1884 se trato de aprobar el decreto del 23 de julio del año anterior y fijar la suma con la cual el gobierno contribuiría a la erección de la obra. “ Queremos que la Asamblea de 1884, doble sus rodillas ante el Divino y supremo Monarca de las Naciones…
El Ecuador no adora al Dios de los panteistas, u otra forma de falsa divinidad, sino a Jesús Dios verdadero… Se ha dicho que la Nación es demasiado pequeña para que pueda dar lecciones de religión o moral al mundo.
Se olvida que la grandeza de su pueblo está en relación de la grandeza de su fe las naciones como los individuos han sido criados para dar mayor gloria a Jesucristo, y una nación es mas grande en cuanto mejor cumple con su fin.
Los pueblos se empobrecen no por la falta de la virtud sino por la práctica de del vicio y el crimen ¿Los tesoros no son de Dios? Como negarle a él una mínima parte de ellos en el culto de amor y gratitud? Si damos a Dios los que le debemos, Dios nos dará el beneficio de la paz verdadera, que se haya en sus manos”
Con esta parte de su hermoso discurso el padre Matovelle consigue que la Asamblea asigne un presupuesto para la construcción de la Basílica del Voto Nacional.

El Congreso clausuró sus sesiones el 21 de agosto El P. Matovelle fue nombrado por 25 votos Consejero de Estado
Matovelle defiende a los Obreros y sus ideas de formar Un Congreso Obrero así lo publica
El 2 de agosto de 1928 cuando pide la organización de la clase obrera del Ecuador, de modo que los artesanos de una provincia puedan ser auxiliados por otras. La creación de talleres modelos de arte en Guayaquil, Riobamba y Cuenca.
Se debe promover actos artísticos para promocionar la industria de las principales ciudades.

Promueve la Colonización Oriental en el año de 1827- 1828. Considera que se debe colonizar el oriente y educar a las clases pobres y necesitadas como son los indígenas.
Defiende los derechos de la Iglesia a poseer bienes materiales.

Promueve la construcción del Ferrocarril del Sur.(Cuenca )
y la Educación religiosa.

Su vocación por las letras hizo que fundara muchas revistas y centros literarios como "Luciérnaga", "El Liceo de la Juventud", "La República del Sagrado Corazón de Jesús", "La Academia del Derecho Público", "El Boletín de la Basílica del Sagrado Corazón " y "El Reinado Social de Jesucristo". Publicó además "El Catolicismo y la Libertad", "Un Drama en las Catacumbas", "Nuestra Señora de la Nube", "La Asunción de la Santísima Virgen", "Meditaciones sobre el Apocalipsis", "Documentos para la Historia de la Beata Mariana de Jesús", etc., obras en las cuales pone de manifiesto su calidad literaria y su profunda fe religiosa.

Gracias a sus gestiones obtuvo que los padres salesianos vengan al Ecuador; fue el mentalizador, defensor y constructor de la Basílica del Voto Nacional y del Monumento a la Santísima Virgen en el Panecillo; fue fundador de los Oblatos y las Oblatas de los Sagrados Corazones de Jesús y María; y de numerosos centros históricos, patrióticos y de beneficencia social.

Venerable Padre Julio Marìa Matovelle fundador de las Hnas Oblatas. Consumado Poeta.

MATOVELLE COMO POETA


El Padre Julio María Matovelle a creado su primer poema, llegando desde el dolor al dolor… El niño se ha tornado por el poeta por el camino más cierto de poesía que es el llanto… La Madre de los Dolores es su madre por afirmación de orfandad y abandono.. la Señora de los puñales sangrantes le acuna en su seno virginal mientras le dice con esa voz que apenas si oye el alma “hijo querido, Hijo querido”

Julio Matovelle poeta de la Virgen María, tiene para ella canto con voz muy suya, con voz que es cariño infinito más también intima tristeza… Si quiera un reflejo de uno de los puñales de la Madre Santa se le clava en lo hondo de pecho y así habla el idioma de belleza para la Madre de Dios quien no tuvo madre terrenal…
A quién dirá Julio Matovolle sus profundas tristezas?... Cómo ha de ser su voz si oído humano no escucho en la cuna esa voz?
Desde la experiencia de su orfandad y pobreza escribe su poesía titulada “A MARÍA” que consta de 13 estrofas, el poema es tierno y transparente y empapado de tristeza.

A MARÍA

Trémulo el labio, la mirada triste,
Vengo a tus plantas, celestial Señora;
¡Ay!, de aquel pecho que el dolor embiste
¡Ay del que llora!

Madre amorosa del que gime y pena
sobre las zarzas de este rudo suelo,
cúrale a mi alma de pesares llena,
calma mi duelo.

Darte quisiera, madre amada, cuanto
brilla en la tierra: seda, perlas, oro;
pero, ¡ay! No ignoras que el amargo llanto
es mi tesoro.

Madre, tú sabes la terrible historia,
que, esquivo, guarda mi llagado pecho,
goces y dichas, ilusiones, gloria
todo deshecho.

El Poeta encuentra a la Madre suprema en todas las manifestaciones de belleza circundantes, la siente dueña de lo más puro, por que desde antes de los tiempos fue consagrada para dirigir la fragancia de los florecimientos, y la fragancia de las constelaciones…



“Matovelle fue un consumado literato clásico, de amplia y sólida cultura intelectual en todos los órganos de la expresión del pensamiento. A lo largo de su Biografía emerge toda su obra de gran fecundidad de este magno cíclope de mentalidad ecuatoriana.” (Wilfredo Loor Biografía del Padre Julio M. Matovelle)

Fue incomparable profesor, escritor, mecenas de juventudes, fundador de centros culturales, etc.
La Academia Ecuatoriana correspondiente a la Real Academia Española, ya lo había nombrado miembro efectivo.

Crespo Toral nos dice de Matovelle: “ gime cual tórtola, canta como ruiseñor, gorjea a lo turpial; y Matovelle dice de sí mismo: “ Como las aves al alborada , el hombre canta al despuntar el rayo de los dorados sueños, entre las halagadoras ilusiones de la juventud, si mis producciones no han contribuido a engrandecer la Patria, a lo menos la verdad y la moral no tienen de que avergonzarse”

“Su poesía es mística pura, , en su poesía esencial es el himno conmovido a lo Divino, en un ambiente de alas ante los inefables misterios” ( Rigoberto Cordero y León)

Matovelle es cuidadoso en el fondo y en la forma; cuida la idea y el modo de decirla, pero no sacrifica el pensamiento a la belleza y sonoridad de la frase. Su poesía nace del alma, escribe para desahogar su propio sentimiento, y como este sentimiento, y como este sentimiento con variedad de formas, es en todo hombre siempre el mismo, su poesía perdura y no pierde actualidad con el transcurso de los años.

Toma las frases de S. Pablo para componer la poesía:

MIHI MORI LUCRUM
UNA GANANCIA ES MORIR.
Ay la vida! ¿Qué es la vida?
Chispa oculta entre pavesa,
relámpago que atraviesa
tempestad enfurecida.

¡Ay la vida!
Es mal que cura la muerte;
negra cárcel que, al morir,
logra el prisionero abrir,
de tal suerte
que una ganancia es morir.

Dejar espinas y abrojos
para ceñirse de estrellas,
secar del llanto las huellas
y clavar en Dios los ojos.

¡Ay! los ojos
que han visto el mundo funesto;
eso es dicha que el que muere
a gloria y cetro prefiere;
y es por esto
que gana mucho el que muere.

¿Qué son los placeres? Humo.
¿Qué es la hermosura? Ceniza
que en el sepulcro se pisa:
cuanto en la tierra hay de sumo,


todo es humo;
¡plata y seda, todo, todo...!
De manera que se gana
muriendo en edad temprana;
de tal modo
que sólo el que muere gana.


¿Por qué tan ruda ansiedad,
tanto afán, tanta locura,
en ir tras lo que no dura,
en buscar la vanidad?

¡Vanidad!
Que duelos mil atesora,
sólo el necio su ganancia
busca en la tierra con ansia,
porque ignora
que es la muerte una ganancia.
Vivamos, pues, a manera
del cautivo en calabozo,
que, ajeno de risa y gozo,
libertad cercana espera;

de manera,
que pongamos todo anhelo
en la gloria de morir,
sin cansarnos de decir
viendo el cielo:
nuestra ganancia es morir.

A
l joven poeta el mundo le llama, la culta sociedad le abre sus puertas, pero Matovelle con miedo de mancharse con la culpa huye contando:
“ La virtud, la Virtud! Ved lo que vale,
Más que el cetro, más que la púrpura y el oro;
En la tierra es el único tesoro.
Y en el orbe no hay cosa que le iguale,
ni en grandeza , ni en gloria ni en decoro”


Pero no sólo flores le ofrece el mundo; sufre por sus amigos cuando son perseguidos por el gobierno de Veintimilla, sufre padecimientos físicos, le atacan dolorosas neuralgias, en sus memorias íntimas nos dice:
“ Yo necesitaba el auxilio del cielo para no estrellarme contra una piedra” Así en las noche se hunde en la contemplación de las estrellas y se hunde en la meditación de problemas desconocidos para en busca de un consuelo para su propia alma, y acepta con plena confianza los designios de la Providencia que le purifica n el dolor para el arribo del eterno gozo.

“Quien sabe cuántos seres en la altura, Si se nublan de llanto nuestros ojos,
Semejantes quizá a los humanos Si la hiel apuramos gota a gota,
Habitan esos globos de luz pura? Ante el cielo postrémonos de hinojos,
¿En los cielos también habrá tiranos, Y esa Patria miremos no remota;
y lágrimas y sangre y amargura? pasa la vida; pasan los enojos.
¿Habrá guerras allá y odios insanos? El cáliz del dolor al fin se agota,
¿O son raza que goza de la herencia Y el alma entonces con radiante vuelo,
Del no perdido edén de la inocencia? Sobre los astros se remonta al cielo,


La Juventud le invita a ahogar su dolor en los placeres; la fama le aturde con sus quimeras y siente necesidad de la defensa. Dentro de su propio ser el hombre viejo entra en lucha con el nuevo, y la victoria se declara por este.

“ Una insaciable sed tengo de gloria, Mas pienso luego que la gloria es nada,
De ser entre los hombres el primero, Vano rumor que en desierto zumba,
De legar mis recuerdos a la historia Flor de un breve día marchitada,
Y de que resplandezca en mi memoria Astro nocturno cuya luz plateada
Cual de la tarde el fúlgido lucero Se extingue en el ocaso de la tumba
Con delirio frenético querría

El cáliz agotar de los placeres ¡Ah! No alma mía, calma ya tu anhelo;
Y de la danza y en medio de la orgía, Hay un ser portentoso a quien olvidas;
Embriagarme de gozo y alegría Tras ese azul y limpio velo,
Cercado en torno de mil bellos seres. Se asienta en el trono el Señor del cielo:
Mas, ¡ay! Comprendo que el placer no existe, Junto a él tus ansias quedaran cumplidas
Que está su copa llena de veneno,
Que la ventura mundanal es triste,
Y que el amor humano se reviste
De un manto terrenal de inmundo cieno

Matovelle cuando es atraído por el mundo, alza el vuelo y se remonta a las alturas para vigorizarse, sacudiendo de sus alas cual cóndor de los Andes para vigorizarse y tomar oxígeno revitalizando su vida.
“Linda es la copa muy linda ,
En la que el mundo nos brinda miel impura;
algo más que la hiel y lloro
No se apura
Pero existen tormentas que el mundo no debe saber, Matovelle aunque no plasma estas tormentas turbulentas en la poesía, sabemos que tiene sus confidencias con la Virgen María.
“ Madre, tu sabes la historia
Que esquivo guarda mi llagado pecho,
Goces y dichas, ilusiones gloria,
Todo deshecho…

El corazón de Matovelle no está tranquilo mientras no descanse en Dios. Hace versos para desahogar su propia inquietud, y después de la lucha entre la gracia y la naturaleza su alma llega a Dios , así en Dios terminan sus versos. Su poesía viene a ser entonces un gran apostolado que enseña el camino del consuelo cristiano a las almas tristes. Crespo Toral nos dice : “ sus cantares tienen arpegios de las jerarquías angélicas”
Matovelle no solo expone en sus poesías el sentimiento de tristeza , en ocasiones juega con las palabras y la idea, encantadoramente:

Cercan al niño querubes,
Y le presentan las nubes
Blando armiño;
Mas, si adelanta unos pasos,
Las nubes se hacen pedazos
Pobre niño.

Matovelle sentía necesidad de compañeros que sientan gusto por la poesía, y junto con el dediquen su tiempo a honrar a Dios como el lo hacía, así funda Los Amantes al Santísimo Sacramento, sus poesías al Santísimo están cargadas de amor, sus versos inspiran confianza y son tan dulces y sentidos que mueven las fibras más íntimas de nuestro ser y se ve que habla en ellos el poeta y el santo.

1.Ven hostia divina 3., Te alzas en el ara
Ven hostia de amor, Peregrina y sola
Ven haz de mi pecho, abres la corola
Perpetua mansión. De níveo fulgor
.2. Lirio de los valles
Bella flor del campo 5.- ¡Oh dueño divino!
Que al nítido lampo ¡Oh amante olvidado!
Del naciente sol ¡Jesús adorado!
4.-Tras esos cendales ¡Mi Rey , mi Señor!
Que atan los querubes Ya tanta fineza,

Cual tras de las unbes Y a tanta ternura
Se oculta el sol Parecen locura
Se oculta a mis ojos, Locura de amor
Mi dueño querido,
Pero el pecho herido,
Me tiene de amor,

21 de noviembre día vocacional  OBLATO